Como una bola de nieve que asimila todo a su paso, volviéndose cada vez una masa más homogénea, unificada y poderosa; las manifestaciones alrededor del mundo crecen y se contagian... y a esta altura, parecen incurables.
Desde la caída del ex presidente egipcio Hosni Mubarak, no han dejado de surgir nuevos movimientos y protestas que gritan por la libertad de los hombres, dejando ver a los presuntos dueños del mundo que la sociedad no está tan dormida como se pensaba, y que tiene más fuerza de la que habían calculado. Efectivamente, Hegel entendía de lo que hablaba: El esclavo no debe su existencia al Amo, sino que el Amo subsiste gracias al esclavo. Y esta dialéctica, queridos amigos, anuncia el inminente final del Amo.
Veamos cómo va la cosa al día de hoy:
Medio Oriente: A partir de las caídas de los gobiernos de Túnez y Egipto, las movilizaciones en el norte de África crecen exponencialmente. El grito es común: Libertad, Derechos, Democracia.
Yemen, Argelia, Bahrein, Libia, Irán, Jordania, Yibuti, Marruecos disputan su libertad. Lamentablemente, toda ganancia implica una pérdida, y en muchos casos los manifestantes están pagando su sueño con la propia vida, y personajes como Gadafi amenazan con "aplastar las protestas".
Así y todo, no parecen tener planes de rendirse. El pueblo no se detendrá hasta que su voz sea escuchada.
China y el Tibet: Miles de personas se han reunido en el Tibet, así como otras tantas han intentado hacerlo en Shanghai, Pekin y otras ciudades, dando lugar a lo que han denominado "Revolución Jazmín".
Nuevamente, las voces parecen gritar al unísono:
mientras que en el Tibet reclaman independizarse del sistema colonialista chino (recordemos que el Tibet, en el Himalaya, si bien es una región autónoma, se encuentra bajo el férreo control de Pekín); en las principales ciudades chinas, los intentos de manifestación- eficazmente abortadas por las fuerzas de "seguridad"- pidieron a gritos, inspirados por las revueltas en Medio Oriente, el fin del duro régimen comunista que rige hace más de 60 años. Mientras tanto, el Gobierno chino es más intransigente que nunca contra todo aquel que ose oponerse a su particular comunismo: Hace pocos días, China se ha convertido en la 2da potencia económica mundial, siendo el principal acreedor de la deuda norteamericana. La nota de color: China ha prohibido al Dalai Lama reencarnar sin su permiso.
Estados Unidos: Dado el tipo de sociedad que es la norteamericana, esta es la revuelta que más me ha sorprendido... de manera grata, claro: Miles de funcionarios públicos, estudiantes universitarios, docentes, no docentes, y otros miles de ciudadanos primero, ante el palacio de Gobierno de Wisconsin, y luego frente al Capitolio, en la Capital estadounidense (Washington D.C.). Las razones: Por un lado, el recorte presupuestario a las universidades, y por el otro la decisión del recientemente electo Gobernador de Winsconsin, el republicano Scott Walker, de recortar derechos sindicales a los trabajadores, limitando los reclamos gremiales al ámbito lo salarial.
A pesar de todo, el flamante dirigente republicano afirma y reafirma su decisión, y asegura que no dará marcha atrás con las reformas. Mientras que por su parte, los trabajadores, ni lentos ni perezosos entienden que si esta reforma es aprobada en Wisconsin, lo sería fácilmente también en otros Estados del mismo corte ideológico.
Por lo demás, todo deja suponer que se trata más de una demostración del poder republicano, que de medidas realmente necesarias. Los ciudadanos hacen bien en no detenerse.
Bolivia: Miles de manifestantes se movilizaron en diversas ciudades del país andino, así como también bloquean accesos a Argentina, en protestas contra del Gobierno de Evo Morales, principalmente por los aumentos en los precios de los alimentos y el transporte. Además, reclaman el cierre de la empresa estatal Emapa, encargada de la distribución de alimentos, al descubrirse que mientras la población hace largas filas, incluso por la noche, para comprar alimentos en escasez, la empresa habría hecho acuerdos para proveerlos primero a funcionarios y sectores oficialistas. El pueblo amenaza con una huelga general y bloqueos si sus demandas no son escuchadas.
Así estamos, señores.
Y, a pesar de las aparencias caóticas, me atrevo a decir que esta seria de levantamientos son uno de los eventos colectivos (porque creo que todo es un gran evento único y colectivo) más positivos y prometedores de la historia de la humanidad.
El juego se les está acabando. Este pequeño despertar, queridos amigos, no es más que el embrión del despertar masivo que se está gestando.
¡A estar alertas!
Me atrevo a decir que el tablero de ajedrez se presenta en esta escenografía:
ResponderEliminarLas fichas negras están todas desparramadas sobre el tablero, torres, caballos, alfiles y varias damas negras, y hay una sóla ficha blanca, un peón, en posición de check-mate contra el rey negro. Las blancas tienen la próxima movida, ni siquiera tienen a su rey sobre el tablero y poseen la inteligencia de la última jugada.