Se avecinan tiempos difíciles.
Vivimos un tiempo de luchas descarnadas, de gritos de soberbia, de blancos y negros, de peligrosos y estratégicos extremismos.
En este espacio, en cambio, buscamos a los Hombres Grises.
Aquellos hombres valiosos que conocen la prudencia, que gozan del don de la paciencia, y que velan día a día por la desaparición de la contienda en pos de una época de paz y crecimiento social, político y espiritual.
Ser un Hombre Gris no es ser tibio.
Ser un Hombre Gris no es "estar a favor de todos y en contra de nadie".
Ser un Hombre Gris requiere de firmeza, pero también de dulce comprensión y compasión; requiere de templanza, pero también de prudencia; requiere de un profundo amor por la Justicia y la Verdad, pero también- y sobre todo- de una honda capacidad de discernimiento.
Ser Hombre Gris es, lisa y llanamente, ser un Hombre Veraz.
La verdad y la justicia no son NUESTRA Verdad y NUESTRA Justicia. Suponer que alguien puede ser poseedor de la Verdad absoluta o ser agente de la Justicia última, nos ubica en un terreno escabroso, contrario al ideal que hacemos público. Más bien diríamos que, quien ostenta la Verdad y la Justicia, no es de fiar.Son la verdad y la justicia que emanan de una lectura crítica; pero cuidadosa, prudente y comprensiva de la realidad. Son la Verdad y Justicia que se dejan palpar en todos lados, tanto en el blanco como en el negro, en esa zona intermedia en la cual nuestro discernimiento nos permite descubrir lo mejor de ambos extremos, para conformar una unidad intermediaria. Somos intermediarios.
No se trata de tomar de lo que hay lo mejor, y aplicarlo cual maquina selectora de "mejores recursos", sino de encontrar un camino intermediario, en tanto no confrontativo, no polarizante, que permita hacer surgir una nueva alternativa que tenga como norte la paz, el crecimiento por medio de la constante búsqueda de la Verdad y la Justicia, pero conscientes de que se trata de una búsqueda que conviene mantener abierta.
No somos hombres tibios. No somos hombres escindidos por la indecisión. No somos hombres que no se juegan.
SOMOS HOMBRES UNIDOS EN UN CAMINO COMÚN, QUE REPUDIAMOS LOS EXTREMOS, Y CONSIDERAMOS FALSO TODO PARTIDISMO, TODO EXTREMISMO, TODA LECTURA SESGADA, TODA FALTA DE ANÁLISIS CRÍTICO Y DE DISCERNIMIENTO.
No somos una religión; no somos una creencia; no somos un partido político; no somos una ONG; no somos una institución: No somos nada de lo que hayas conocido alguna vez.
De nosotros- los seres humanos- depende nuestro destino. Todos podemos ser Hombres Grises, sólo debemos animarnos a salir de nuestras seguras cuevas de conocimiento previo, de la caverna donde sólo conocemos sombras de la realidad.
Todos podemos ser un Gran Hombre Gris. Todos podemos ser parte- fundadora- de un futuro mejor.
La Verdad y la Justicia, están al alcance de la mano. Están en el corazón de cada uno, a la vez que no nos pertenecen.
Así y todo, te ofrecemos conformar un Movimiento que velará por la Paz, por el Amor, por la Verdad, por la Justicia: por el Despertar de la humanidad.
Conviene que quien guste adherir al Movimiento como el propuesto, entienda que el objetivo mismo debe ser puesto en cuestión en todo momento, dado que siempre se corre el riesgo de convertirlo en un polo más, sea "el mejor camino" o "el peor camino".
En suma, se trata de cuestionar para así avanzar, movernos, generar nuevas ideas, nuevas políticas, nuevas posiciones, nuevas consciencias; en un estado actual de cosas que se apoya en la diaria cristalización de saberes, conocimientos, modos de hacer, y todo lo que se te ocurra.
¿Te sumás?
